El colorido Guppy: el más popular del acuario

El Guppy es un pez muy popular, casi todo el que ha tenido un acuario ha tenido un ejemplar en su momento. Es fácil de cuidar, se reproducen sin problemas y no requieren de condiciones especiales, por lo es ideal para principiantes.

Tiene muchos nombres pues fue descubierto varias veces en varios lugares, por personas distintas y cada una de las cuales le dio un nombre.

Originario de Trinidad, Barbados, Venezuela y norte de Brasil, fue visto por primera vez en 1859, por un zoólogo llamado Wilhelm Peters, que los bautizó con el nombre de Poecilia reticulata.

Luego fue de nuevo “descubierto” en 1861 por Filippo de Filippi y se le llamo Lebistes poeciloides. Mas tarde, el naturalista John Lechmere Guppy encontró ejemplares en la isla de Trinidad y los envió al Museo Británico, y les dio el nombre de Girardinus guppy.

En la actualidad, comúnmente se le llama guppy, en Trinidad se los conoce como “pez millón” por su alta tasa de reproductividad. En Argentina y Uruguay es conocido como “lebistes”.

Características de los Guppys

El guppy, lebistes o pez millón (Poecilia reticulata) es un pez ovovivíparo de agua dulce que habita en zonas de corriente baja de ríos, lagos y charcas.

Los machos son más pequeños que las hembras (3 a 4 cm), con una variada gama de colores en el cuerpo y la cola. Las hembras son más grandes (5 a 6 cm), con menos colores, y cola simétrica y redondeada, normalmente del mismo color que el cuerpo.

Alimentación

Son peces voraces y su alimento puede ser de lo más variado; aceptan los preparados para especies tropicales, no rechazan las dietas basadas en elementos vegetales y son felices cuando encuentran alimento vivo como larvas de insectos y pequeños crustáceos.

Lo ideal es ir alternando los distintos tipos de alimento. De hecho, les gustan tanto las larvas de mosquito que se han usado para controlar la población de estos en algunos países y luchar contra la malaria.

Estos peces se alimentan principalmente de la superficie y menos del fondo, aunque pueden bucear y picotear pedazos de comida de otros lugares sin problemas. Tienen un metabolismo muy rápido y se recomienda, en la medida de lo posible, alimentarlos poca cantidad, pero varias veces al día (a partir de un mínimo de dos).

Cuidados del Guppy

Aunque es difícil que contraigan enfermedades, siempre puede suceder, sobre todo si el acuario no está en las condiciones de higiene apropiadas.

Uno de los síntomas que delata que algo no marcha bien es la aparición del llamado “moho de los órganos”, el problema es que resulta muy difícil detectarlo a tiempo ya que su primer síntoma es el decaimiento y cuando este aparece el afectado muere a los pocos días.

También pueden sufrir la llamada “peste de agua dulce” que se caracteriza por la aparición de manchas blancas en la piel y la “podredumbre de las aletas” con consecuencias fatales para el pez.

Todas estas enfermedades están relacionadas con el mantenimiento del acuario, por lo que una higiene adecuada y un buen cuidado pueden evitarlas.

Los guppys no son difíciles de cuidar. Les gusta un acuario que cuente con cierta cantidad de vegetación, aguas tranquilas o de corriente débil y amplios espacios para andar entre la vegetación. Necesitan también bastante luz, entre 10 y 18 horas diarias con el agua ligeramente alcalina y la temperatura entre los 22° y 28°.

Evita súper poblar el acuario pues tus guppys no crecerán adecuadamente, degeneran y acaban enfermando. Son peces pacíficos y pueden convivir con otras especies no agresivas.

Reproducción del Guppy

Anteriormente comentamos que los guppys son peces ovovivíparos. Esto quiere decir que ponen huevos, pero que las hembras los incuban en su interior y los alevines salen desarrollados del vientre de sus madres. Lo que da la impresión de un parto como en los mamíferos.

Durante la gestación la hembra engorda visiblemente y muestra una mancha negra en su parte posterior. Cuanto más grande y más oscura es esta mancha, más próximo está el momento del alumbramiento.

Los pececitos recién nacidos o alevines, van cayendo al fondo y empiezan a nadar. Es posible que la hembra no los alumbre todos de una vez, sino que vayan naciendo en un lapso de unos 3 días. Las crías pueden ir desde 5 alevines hasta un máximo de 100 dependiendo del tamaño de la hembra y sus condiciones de vida.

Terminado el nacimiento de los alevines, es mejor separarlos en un acuario aparte para evitar que sean devorados por su propia madre u otros peces de mayor tamaño que ellos. Tenlos separados hasta que alcancen un tamaño que supere el de la boca de los otros peces con los que compartirán el acuario.

Cambio de sexo de los Guppys

Desde hace mucho tiempo existe el mito del cambio de sexo en los guppys, si bien existen otras especies de peces que si lo hacen, en los vivíparos no es así.

Los guppys NO cambian de sexo. La hembra puede guardar el esperma del macho para autofecundarse después, lo que podría dar la idea de que no necesitan machos para fecundar, o que alguna hembra presente cambio de sexo para la fecundación. En realidad, los huevos pueden ser fertilizados en diferentes alumbramientos sin necesidad de que haya un macho presente por que la hembra puede guardar el esperma del macho inicial.

También hay casos de “machos tardíos” que maduran tarde. Si bien los guppys alcanzan la madurez sexual a los tres meses de nacer, algunos se desarrollan tarde, haciendo difícil la diferenciación entre machos y hembras. Puede que tomen algunas características externas del otro sexo, pero no son funcionales, así que no se produce un cambio de sexo.

Fuentes acuariofilia.net  – wikipedia.org