Gato Bengalí, un leopardo en miniatura
También conocido como el gato leopardo por su parecido a estos animales, el Bengalí o gato de Bengala no es producto de la naturaleza. La raza se crea como resultado de un programa de cría desarrollado por Jean Mill, experta norteamericana en genética, a partir del cruce entre el gato leopardo de Asia (Felis bengalensis) y gatos domésticos.
A los felinos resultados de cruce entre animales salvajes y domésticos se les llama gatos híbridos. La finalidad de este proyecto de cría en particular era tener gatos con la apariencia salvaje, pero con el temperamento de un gato doméstico.
Los Bengalíes fueron exhibidos por primera vez en 1985 en una exposición felina, compitiendo en la categoría de Nueva Raza y Clase Color, dejando entusiasmados al público.
Características del gato Bengalí
El Bengalí tiene la apariencia de un leopardo en miniatura. Presenta un cuerpo muy fuerte y musculoso, pesando entre 5 y 8 kilos. El porte es elegante, aunque de aspecto fuerte, debido a su musculatura y a la robustez de sus huesos.
Los machos son bastante grandes, pudiendo crecer mucho más que las hembras. Tienen los hombros muy musculosos y elásticos, lo que les da, al andar, la apariencia de un depredador. En ambos sexos, las patas posteriores tienen gran fuerza lo que les permite saltar como gacelas.
Al primer mes aproximadamente el manto de los gatitos cambia de color, transformándose en un gris difuminado. Tras esta fea etapa adolescente, vuelven a recuperar su color original, pero si las manchas son negras o muy oscuras tardan más tiempo en recuperar el color de su pelo. En los mejores casos, las puntas de los pelos tienen un destello dorado. Hoy en día, la mayoría de los Bengalíes muestran un dibujo «tabby» en la cabeza, formado por la típica «M» en la frente.
Hay que añadir, que el gato Bengalí tiene un tacto especial en su pelo. Es extremadamente suave, incluso en algún caso similar al tacto del visón.
Tipo de manto del Bengalí
Según el tipo de diseño de su manto, los Bengalíes se clasifican en dos tipos:
a) El Spotted: Manchitas de tono más oscuro que el fondo para presentar ese contraste típico. Estas manchitas pueden ser o bien puntitos (spots) o bien rosetas. El brown spotteds, snow spotteds y silver spotteds, son las principales variedades.
b) El Marble: Es un diseño marmolado simulando unos remolinos en el manto. Así podemos encontrar brown marble, snow marble y silver marble, como las principales variedades.
Color del manto del Bengalí
De acuerdo al color del manto del Bengalí se clasifican en:
1) Brown. El manto tiene un tono marrón claro, y en otros casos presenta un tono anaranjado. Presenta spots, rosetas o remolinos (efecto marble). Estas manchas serán más oscuras: combinación de marrón oscuro, negro, marrón claro y crema.
2) Snow. El manto es de color crudo o crema suave con spots, rosetas, o remolinos (diseño marmolado). Estas manchas serán más oscuras: gris, marrón oscuro, chocolate.
3) Silver (plateado). Manto totalmente blanco con marcas oscuras para ofrecer un alto grado de contraste. Pueden ofrecer diseños del tipo spotted, rosetas, o marmolados. No deben tener tonalidades doradas ni en las patas, cara o barriga, el color debe ser totalmente blanco. Nacen con sus marcajes y los mantienen durante su periodo de crecimiento y edad adulta.
4) Otros colores. Encontramos otros colores derivados como el azul, el canela, el melanístico (negro), entre los más destacados. Aunque no son colores reconocidos para la competición, hay ciertos clubs felinos que permiten la participación en la categoría de nuevos colores.
Carácter del Bengalí
Son gatos juguetones y muy sociables. Conviven perfectamente con otras razas de gatos, y otros animales. Son muy activos, habladores y cariñosos. La mayoría tienen una voz suave, excepto cuando entran en celo. Algunos emiten sonidos extraños que parecen el ladrido de un perro.
Son muy curiosos e inteligentes. No hay mejor diversión para un Bengalí que investigar los bolsos de la gente que llega a casa o supervisar la compra del supermercado.
También pueden ser tranquilos. Algunos son muy melosos, solicitan constantemente sus mimos, ronroneando estentóreamente. Son cariñosos incluso con desconocidos. Les gusta dormir con su tutor humano y lo persiguen a todas partes, como si fueran perros.
Cuando llegan nuevos a casa, durante su primer día, los Bengalíes pueden mostrarse de dos maneras: por una parte, los más tranquilos, que llegan ronroneando y haciendo mimos con su familia humana. Y por otra parte, los menos tranquilos, que les costará entre 3 y 5 días, aproximadamente, en adaptarse a su nuevo entorno y nuevos amigos gatunos o perrunos si los hubiere. Hay una minoría muy pequeña que necesitan algo más de tiempo, pero a la larga y con la ayuda del nuevo tutor humano, su confianza se hará fuerte y mostrará un carácter abierto y muy cariñoso.
Un gato al que le gusta el agua
Los gatos Bengalíes no tienen ningún miedo al agua. Por el contrario, les atrae. Esto es una reminiscencia de su ancestro, el gato leopardo de Asia, que vivía siempre cerca de los ríos.
No les importa mojarse; incluso algunos les gusta bañarse con sus personas favoritas o se meten en la bañera cuando rebosa el agua. Un buen entrenamiento es colocar un poquito de agua en la bañera y añadir una pelota de ping-pong: el Bengalí puede permanecer allí durante horas jugando y chapoteando. Cuando beben acostumbran a golpear el agua con sus patas.
Cuidados del gato Bengalí
Como cualquier otro gato de pelo corto, el gato de Bengala apenas necesita cuidados para mantener su aspecto en perfectas condiciones. Se trata de un felino que siempre está limpio gracias a su propio aseo personal. Sólo necesitará sus correspondientes visitas al veterinario para mantener su estado de salud.
Tienen excelente apetito, por lo que si ves que tu gato deja de comer y se queda en un rincón, es que algo le está pasando y es mejor acudir al médico veterinario.
Como detalle adicional el Bengalí produce más cerumen en las orejas que otros gatos, así que deberás limpiar sus oídos con más frecuencia. Asimismo, producen secreciones de grasita oscura en la barbilla que a primera vista parece ser suciedad, por lo que se debe limpiar periódicamente. Este aspecto es algo normal y muy característico de la raza.
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Fuente: gatobengali.com – mundoanimalia.com